Abrir la mano y tocar. Abrir la boca y llenarla. Que un sí, suave y firme, rodease la petición. Tener sueño y caer dormida. Despertar un instante y dormir de nuevo dentro de unos brazos, sobre un pecho, sábanas. Las voces de los adultos charlando durante la cena mientras la niña se acurruca en el sofá, su nariz escondida entre los cojines. Hundir los pies en la arena mojada caminando tras las huellas de gaviotas. Tras las huellas de un perro que salta brincos sin correa a una distancia prudencial de la espuma blanca que hacen las olas. Mover la mano y alcanzar. Acercar la boca y llenarla de dulce, de salado. De dulce, de fresquito, de burbujas. Ir con mamá a la playa. Mamá comiendo un bocadillo en bañador. Calor, arena y sal en la cara interior de los muslos que rozan entre sí caminando lentamente hacia mamá que come un bocadillo en bañador.
Un amor de verano de... Sara Torres: ‘Pan con aceite, siesta a las seis’
Scritto il 20/08/2025
da Sara Torres
La escritora retrata a una pareja que se conoce lo suficiente para que el despertar de a dos resulte familiar, aunque no deje de ocurrir sin asombro